Hoy llega el nuevo espectáculo de Ernesto Sevilla y Joaquín Reyes al Kursaal (19 horas, 30 euros), que se titula «Viejóvenes». El término viejoven, como el de adolestreinta, se ha popularizado estos años debido a que estamos empeñados en no crecer para no asumir compromisos y responsabilidades. Vivimos inmersos en una larga juventud y el síndrome de Peter Pan está muy extendido en nuestra sociedad. Existe una web, adolestreinta.com, puesta en marcha por tres chicas (¿mujeres?), que habla sobre el tema y hasta el dúo Ojete Calor de techno pop absurdo y chanante le ha dedicado una canción al concepto viejoven:
Pero no es lo mismo ser viejoven en nuestra ciudad que Barcelona, Londres o Berlín. Aquí la cosa se complica y perpetuar tu juventud no es tan sencillo como parece. Más vale tener un pequeño manual de supervivencia:
- A no ser que haya concierto, no hay bares abiertos hasta tarde un día entre semana. Confía ciegamente en el fin de semana. Tienes el viernes y el sábado por la noche para ser el rey del universo. Bueno, mejor elige. Las resacas ahora te duran tanto que impedirán que salgas de marcha dos días seguidos.
- No responden a tus mensajes de whatsapp, te miran como un bicho raro por proponer planes nocturnos… Te estás quedando solo en la cuadrilla. Asúmelo.
- Como mucho te queda ese amigo que acaba de romper un relación o, peor aún, tu amigo sensible que te sigue el juego por compasión. Das pena, pero ellos más.
- La última vez que salisteis todos juntos fue en una boda. Y la siguiente también será en una boda. Estás en esa edad… de la que debes renegar.
- No te queda otra que hacer amigos nuevos, normalmente más jóvenes que tú. Marca un límite razonable con la edad, no es plan de terminar volviendo a hacer litros en los bajos de la Concha. No hagas el ridículo.
- No te vengas arriba con las comidas de la cuadrilla. Tienes que aguantar con entereza el día porque tu objetivo sigue siendo cerrar una discoteca como un campeón.
- Bebe poco a poco tus gin-tonics. Y acompáñalos de un vaso de agua: evitarás resacas monumentales.
- Que no te confundan: no eres un pagafantas. Que no tengas pareja estable no quiere decir nada. Te gusta salir de farra. Los losers son ellos.
- Se acabó ir al Altxerri. Ahí van los padres. Tampoco entres al Disco Friends, lleno de señores (como tú) con ganas de marcha. Tu territorio es otro.
- El mayor enemigo es la calvicie. Si la alopecia se ha evidenciado en tu azotea para quedarse, sea cual sea su versión (autopista frontal, helipuerto, frontón Jai Alai…), estás perdido: eres un señor.
3 Comentarios
Sus, te estoy amando locamenti.
Con lo bien que te estabas portando con la lista de deberes del perfecto viejoven, y de pronto así, sin avisar, como se perpetran las puñaladas traperas de manual, me cuelas el último punto del decálogo y mi castillo de naipes adoletreinta queda reducido a cenizas.
Desde tu atalaya de pelazo mod adicto al minoxidil podrás divisar todo lo bien que quieras los cartones clareantes de tus coetáneos, pero has perdido un amigo. Calvo, pero amigo. Incapaz de sobrevivir a un contrapicado con luz halógena cenital, pero amigo. Que Casillas y Nadal te lo perdonen, porque lo que soy yo, nanai. Qué insensible y qué feo todo…
Pues como viejoven chica, que ha cumplido en estos últimos dos meses todos y cada uno de los 9 primeros puntos, te digo que me encantan los calvos, y los que se rapan mas, fuera complejos! Muy creído se lo tienen los que pasan los 30 sin entradas y los calvos acaban siendo mas majos.