Estos días, a raíz de los fallecimientos de Iñaki Azkuna y Adolfo Suárez, hemos visto cómo muchos se han deshecho en elogios hacia estas dos emblemáticas figuras políticas. También hay quienes, generalmente desde el respeto, han mostrado sus legítimas discrepancias ideológicas e incluso personales. En el caso de Azkuna nadie pone en duda su infinita adhesión a Bilbao, como si para bien o para mal una cosa fuera unida a la otra. Azkuna era bilbaíno hasta la médula. ¿Pero cómo se miden estas cosas? ¿Se puede calcular el grado de unión a Bilbao, Bermeo o Zumaia?
Seguramente no de una manera científica y rigurosa, pero en Kulturaldia nos hemos lanzado configurando una posible lista con 15 factores que pondrán a prueba tu grado de donostiarrismo.
1.
«Donostia es la ciudad más bonita del mundo». Y punto. No hay más que hablar. Da igual que no hayas ido más allá de Las Landas y algún viaje esporádico a Londres y París con Ryanair.
2.
Puede que seas más de Ondarreta o de la Zurriola, pero de cara al exterior la mejor playa (urbana) del mundo es La Concha. Esta afirmación categórica gana enteros si eres usuario de sus exclusivos toldos.
3.
La expresión «como aquí no se vive en ninguna parte» cobra todo su sentido si sale de boca de un auténtico donostiarra. Es decir, eres parte de ese porcentaje que opina que a San Sebastián no le falta nada. «Es una ciudad muy completa», aseguras convencido.
4.
Para los bilbainos hay dos cosas sagradas: el Athletic y la virgen de Begoña. Para el donostiarra de pura cepa la Real y la víspera de San Sebastián. Aquí tampoco hay discusión: el donostiarra está predestinado a vestirse desde pequeñito de cocinero y sufrir con su equipo.
5.
Ser miembro de una sociedad gastronómica o que, como poco, que alguno de tus amigos de la cuadrilla sea socio son puntos a tener en cuenta.
6.
Haberse vestido de baserritarra al menos una vez en edad adulta -abstenerse aquellos que de txiki fueron de esta guisa por imposición familiar- en Santo Tomás, un must en la agenda.
7.
Haber hecho el siguiente recorrido vital: en la adolescencia frecuentabas la plaza de la Trini y/o la Zona. Después pasaste por bares como el Ttun-Ttun, Etxebe, Txalupa… Hasta por Reyes. Ahora los viernes ni sales y el sábado te tomas una copa o dos. El Gin-tonic, premium, mesedez.
8.
Una de las diferencias con uno de la provincia es que crees firmemente que tu acento vasco es mucho más sofisticado, urbanita, neutro.
9.
Otra diferencia sustancial. Generalmente, y aunque aquí hay muchas excepciones, te preocupas más por la vestimenta que uno de Beasain. Ejemplo ad hoc: cuando en verano vas a trabajar a la CAF no se te ocurre llevar bermudas. Vienes de la capital.
10.
No entiendes de qué va Donostia 2016 -«pero, oye, nos va a venir muy bien»-, te van los EVENTOS tipo Jazzaldia y regatas y no has pisado el San Telmo desde su remodelación -«pero a los de Bilbao les va de maravilla con el Guggenheim»-. Estás ganando puntos Donosti label.
11.
Como casi todo el mundo acabaste cansado de Odón Elorza, pero tantos años en la alcaldía han dejado huella. Por eso, una de tus frases de cabecera es #conodonnopasaba.
12.
Has opinado a favor -«es un ejercicio democrático»- o en contra -«es un ejercicio antidemocrático»- en la polémica en torno a Igeldo. Como donostiarra de pro que eres no has resistido la tentación de hablar del tema estrella de estos últimos meses.
13.
También has visto el siguiente vídeo -y has dado tu valiosa opinión- sobre la perra que recientemente mordió a un bañista en La Concha. Trendig topic en San Sebastián. Camino de llevarse el Pulitzer guipuzcoano.
14.
Eres de los que se hace una idea de los demás en función de en qué colegio ha estudiado o en qué equipo de fútbol escolar ha jugado. Detalles biográficos FUNDAMENTALES que definen a una persona de 40 años como si tuviera 13.
15.
Tu grado de donostiarrismo llega a su máximo esplendor cuando paseas por la ciudad y te encuentras a la casa de tus sueños, esa que tiene vistas al mar y llevas años, décadas, observando con una mezcla entre envidia y rabia. Cuesta más de un millón de euros.
5 Comentarios
Yo soy de Getxo. Ahí sí que hay nivel. Nos faltarán 100.000 habitantes para llegar a la población de Donostia, pero no tenemos barriadas de mala muerte como Herrera, y casi tenemos más palacios y mansiones que en toda Gipuzkoa. Bilbao también, al lado de Getxo, una porquería.
La foto de los flipaos esos jurgoleros, ¿es una sacada en el campo del Bilbao? Porque Anoeta no es… hay logos de bbk, juasjuas!
Otro apunte de donostiarrismo, por cierto, es precisamente ese: decir «el Bilbao» para fastidiar más a sus aficionados, en vez de «el Atleti».
Exacto: es de San Mamés…
¡Hombre! falta alguna que otra cosa:
1.- Sentirse henchido cada vez que sale una estadística indicando que se tiene el m2 más caro que manhattan
2.- Reconocer públicamente que los fuegos justifican una semana grande por si solos y que el helado de después funciona mejor que un redbull
3.- Pasear por la concha al menos el doble que las veces que se va a misa y siempre vestido punta en blanco, ¡qué se note la clase!
4.- Conocer no menos de diez chistes de bilbainos y anécdotas sobre reinas regentes o nobles que visitaban la ciudad en blanco y negro.
…
¡Jajajaja! Apuntados quedan los cuatro puntos y que se lean de seguido junto con el resto. ¡Gracias elhombreígneo!