THE HOLE LLEGA A DONOSTIA (Y YO NO PUEDO IR)

Una de mis fantasías de infancia era la de ser cabaretera. Películas como Cabaret o Moulin Rouge crearon en mi imaginario toda una serie de fantasías en las que la música, el baile y un vestuario dominado por las plumas y el strass eran los protagonistas. Con los años llegó el pudor, y decidí que «ama, quiero ser actriz» sonaba mejor que «ama, quiero ser cabaretera.» Arrinconé mis fantasías de purpurina en un lugar al que sólo accedía de vez en cuando, no sin cierta dosis de vergüenza. Y es que detrás de la palabra «cabaret», también subyacen palabras como «desnudez», «desvergüenza» e incluso «prostitución».

Años más tarde, sentí un gran alivio al leer la opinión de la británica Caitlin Moran sobre este arte en su libro «Cómo ser mujer». Según Caitlin, el cabaret es, a diferencia de los clubs de striptease, un lugar donde las mujeres juegan con su sexualidad de una forma libre y divertida. Ellas son las protagonistas, ellas deciden (gracias, Caitlin).

En España, el resurgir del cabaret llega de la mano de «The Hole», un espectáculo creado por Paco León, Yllana y Letsgo, que ya lleva dos temporadas triunfando en los escenarios de todo el Estado y que aterriza hoy en el teatro Victoria Eugenia. «The Hole» promete mezclar teatro, números circenses, música y humor, todo ello regado con una alta dosis de sensualidad y descaro. El show estará presentado por un maestro de ceremonias que, con la excusa de hacer pública su relación amorosa, invitará a sus amigos a una fiesta en la que serán atendidos por personajes tan diversos como La Madame, Los Mayordomos o Las Supernenas.

Si no vives en Donostia, es muy posible que no te hayas enterado de esto, ya que aparte de los carteles que se pueden ver por la ciudad, no he visto ninguna otra publicidad. Sorprende que, a día de hoy,  no se le haya dado más bombo vía redes sociales a un evento así.

Desgraciadamente, servidora no podrá disfrutar del espectáculo. El precio de las entradas rondan los 40 euros y mi bolsillo no se lo puede permitir. Hablando ayer con una amiga que vio el show en Madrid, me dijo que ella pagó 20 euros gracias a la web de atrápalo. No os molestéis en buscar entradas para Donostia en esta web; ya lo he hecho y no hay nada. Life is a cabaret, decía la canción. Mi vida, de momento, tendrá que prescindir de él.