La sala Dabadaba ha abierto la veda: ¿cuál ha sido el mejor concierto del año? En su página web han habilitado una encuesta para poder elegir las mejores actuaciones de 2015. Se pueden votar todos los grupos que uno quiera entre un total de 207, una auténtica vorágine que resume de alguna forma no sólo la extensísima oferta musical de la que hemos podido disfrutar en Dabadada, sino en Donostia y alrededores.
Hace tan sólo tres o cuatro años hubiera sido impensable. Pero hoy Donostia es un referente. Contamos con promotoras de signo muy diverso que se encargan de que podamos disfrutar de conciertos de todo tipo. ¿Que quieres indie? Pues ahí tienes a Ginmusica y Men of Rock, principalmente. ¿Te gustan los sonidos más pesados y rockeros? Tranquilo, que con Red Ribbon te vas a saciar ¿Quieres saber qué es lo que mola y que no te den gato por liebre? En Ayo Silver! son especialistas en descubrirnos cosas nuevas. ¿Te mola el garaje y el rock and roll de toda la vida? Para eso ya está Juancar Bloody Mary que a veces se asocia con la iniciativa Gaztemaniak! de la Diputación.
Luego están las salas y casas de cultura, que aportan su granito de arena. El Bukowski, por ejemplo, no ha dejado de programar conciertos y últimamente se la está jugando con actuaciones gratuitas. Hay veces que la jugada les ha salido bien y la sala estaba a reventar (Le Butcherettes) y otras no tan bien, como fue el caso de ayer al mediodía con Luma y The Saurs.
La sala Doka también suele programar conciertos regularmente. Los hay para todos los gustos y colores, pero es verdad que normalmente suelen imponerse los sonidos metaleros (Angelus Apatrida toca el 26), jamaicanos, grupos tributo / versiones… Aunque con menos ahínco que otras temporadas, Mogambo sigue escarvando en el underground del punk y del hardcore/grincore. Por último, las casas de cultura (Egia, Intxaurrondo y Larratxo…) tienen una agenda bastante apretada y también aportan lo suyo.
Todo esto está muy bien, pero vayamos al lío. ¿Cuál ha sido el mejor? ¿Cuál ha sido ese concierto por el que pasarán años y hasta décadas y nos seguiremos acordando por ser único e irrepetible? Por mí parte, no sé cuántos habré visto. ¿100? ¿120 en total? La memoria es selectiva y puñetera.
Así, a bote pronto, guardo un excelente recuerdo de los conciertos de Luna -qué guitarras, qué calidad- y Jacco Gardner -qué sensibilidad- en Intxaurrondo; de la apabullante psicodelia de Moon Duo y la abrasiva propuesta de The Warlocks en Dabadaba; del poderío de Bullet Proof Lovers y la garra soul de Lee Fields, ambos en el Jazzaldia; la primera vez de Lie Detectors en el Bukowski; Rafael Berrio en plan rockero en Gasteszena; el maravilloso delicatessen de House of Wolves en el Teatro Abandonado de Igeldo; el desparrame synth-pop de El Último Vecino en el Txiki Psych Fest; la clase de The Hanging Stars, la ortodoxia mod de Fogbound…
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