“Una de las cuestiones que siempre nos trae de cabeza es la financiación. En todas las ediciones desde la organización asumimos esta cuestión con incertidumbre. Hemos contado con diferentes apoyos tanto de patrocinadores privados como de organismos públicos, pero en ningún caso se han llegado a cubrir los gastos del festival y siempre nos ha tocado cubrir parte de la financiación desde la organización. En esta edición programada para 2014 el festival está sufriendo la falta de recursos económicos para la cultura”.
Aquí reside el problema: la cultura ha dejado de ser una prioridad para las instituciones públicas y privadas. En época de crisis han decidido cerrar el grifo. Ya no les interesa, o no al menos tanto como antes. El festival de documentales musicales Dock Of The Bay así como otros muchos agentes culturales se han visto obligados a recurrir a plataformas de crowdfunding, que no dejan de ser una vía de captación de fondos económicos.
Como dijo una vez www.queridoantonio.com, el crowdfunding más antiguo que existe es una boda.
En el caso del Dock Of The Bay han colgado su proyecto en la web de www.verkami.es describiendo en qué consiste el festival, por qué han recurrido a la financiación individual y a qué se destinarán las aportaciones de los contribuyentes. Se han marcado un objetivo de 7.500 euros. Llevan 2795 recaudados y hoy 16 de octubre quedan 24 días para que finalice la campaña. Aún estás a tiempo de echarles una mano entrando aquí.
“No obtenemos beneficios, tan sólo buscamos financiación para cubrir los gastos generados por el festival”, explican. “En el caso que se supere el objetivo propuesto, el festival dedicará las aportaciones a aumentar su programación”. También han colgado un bonito vídeo para incentivar a la gente.
El crowdfunding o micromecenazgo ha potenciado el sentimiento de comunidad y solidaridad en una sociedad dominada por el exceso de individualismo, desconfiada y celosa del éxito de los demás. Esto es muy positivo. Pero su éxito tapa al mismo tiempo un hueco enorme. Los ciudadanos son los que están realizando el trabajo que las administraciones públicas deberían hacer (con ayuda de los patrocinadores privados).
Parece que preservar y promocionar la cultura y las artes no responden ya a un bien común, que es cosa de una élite que está a por Rolex en lugar de a por setas. Sin embargo, una sociedad plenamente avanzada necesita ser educada en valores y conocimientos culturales. Necesitamos entretenernos y pasarlo bien y, también, armar un espíritu y pensamiento críticos.
Eso es, ni más ni menos, lo que otorga la cultura. Así que no estamos hablando aquí de una cuestión secundaria o menor. Que no se nos olvide que detrás de una exitosa campaña de crowdfunding hay un gobierno que ha dejado de apoyar una iniciativa y una marca de cerveza que no le ha parecido suficientemente comercial.
Aurrera, Dock Of The Bay!
1 Comentario
Los organizadores podrían especificar al menos qué gastos tienen, por partidas y no esa abstracción de «gastos generados por el festival».
¿El ayuntamiento no colabora cediendo Teatro Principal y trabajadores? Y lo mismo con la SADE – Sala Trueba -.
Si el gasto de cines y currelas lo tienen cubierto, ¿en qué se va la pasta aparte de fees y subtitulaje?