El próximo viernes 5 de diciembre llega a los cines «Mommy«, la quinta película de Xavier Dolan (Quebec, 1989). Se estrenó en el pasado festival de Cannes y se armó un considerable revuelo con el formato elegido por el jovencísimo director canadiense: la pantalla queda configurada como un móvil XXL colocado en posición vertical durante casi hora y media de metraje. En su tramo final, eso sí, se pasa a la tradicional panorámica horizontal.
Pero no queremos a Dolan sólo por su osadía y desparpajo formal, por descolocar a todos en un mundo demasiado encorsetado. Dolan es un niño prodigio y también un enfant terrible: su ópera prima, «Yo maté a mi madre» (2009), financiada con «el dinero y la paciencia» de sus amigos, es un aguijonazo contra la figura de su propia madre, la cruel venganza del hijo cineasta que, en parte, se había basado en su propia adolescencia. Con su pelo enmarañado y sus enormes gafas de pasta, con ese aire de chico indie que pasaba por aquí, se convirtió en la sensación de Cannes. Es conocida la historia del público ovacionando la película de pie durante 8-9 minutos (los periodistas no se ponen de acuerdo). Fue premiada dentro del apartado de la Quincena de Realizadores y le abrió las puertas a varios países.
Chico para todo (escribe, dirige, produce y protagoniza sus películas), con su segundo largometraje, «Los amores imaginarios» (2010), las puyas van dirigidas a su mejor amiga. La historia arranca al modo de un «Jules et Jim» contemporáneo, con los tres protagonistas durmiendo juntos en la misma cama, pero la amistad de Francis (Xavier Dolan) y Marie (Monia Chokri) pronto se resquebraja por sus sentimientos hacia Nicolas (Niels Schneider), el tercero en discordia. Comedia, drama y, de nuevo, testamento autobiográfico. También se estrenó en Cannes, donde Dolan ya es un habitual.
En los 10 días de cine alternativo que estamos disfrutando en este final de noviembre la doble propuesta de Dolan en Los Jueves del Trueba a las 20 horas es, probablemente, la más atractiva para paladares inquietos, exquisitos y, por qué no, rebeldes. Sus dos primeras películas, “Yo maté a mi madre” y “Los amores imaginarios”, por un precio de 9 euros. Una sola, 6. La Noche de Xavier Dolan, que es como se la ha bautizado, promete.
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